¡GRACIAS SEÑOR! por darnos el privilegio de reunirnos hoy, me hicieron falta, me hizo tanta falta reunirme con nuestra congregación. Gracias a todas las personas que han dispuesto en su corazón servir al Señor con el arreglo del gimnasio y el café antes y después del servicio. Qué el Señor siga poniendo ese deseo en sus corazones 🙂
El tema de hoy fue; “Nos dedicamos al trabajo” y la idea grande de hoy fue; “Seguir a Jesús es dedicarte a su Misión” Seguimos estudiando la vida de Jesús según el evangelio de Mateo, hoy vimos como Jesús se dedicaba completamente a predicar el evangelio, a enseñarle a la gente de que se trataba el Reino de los cielos y de como entrar en el.
Jesús llama a sus seguidores a ser como Él, a entregar nuestra vida, nuestros placeres y todo lo que somos a ser como Él era, pero el problema es que nosotros queremos tener sólo un poco de Jesús en nuestra vida, lo suficiente para ser salvos, porque tenemos nuestra propia misión y nuestros propios própositos que muchas veces van en contra de lo que Jesús nos pide como sus seguidores.
Jesús pide que con nuestra vida enseñemos a los demás como es ser como Él, no podemos seguir a Jesús sin cambiar radicalmente nuestra vida y dar muestras palpables de lo que es el Reino de Dios, eso significa que con lo que somos los demás vean lo que es tener una vida restaurada y reconciliada con nuestro Padre, que los demás vean a través de nuestro matrimonio como es una relación de sumisión y de amor con Dios, que con nuestra relación con nuestros hijos los demás vean como es le relación de amor entre Dios y nosotros, etc.
Jesús recorría toda Galilea. Enseñaba en las sinagogas de ellos, predicaba el evangelio del reino, y sanaba toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo.Su fama se difundió por toda Siria, así que le llevaron a todos los que tenían dolencias, a los que sufrían de diversas enfermedades y tormentos, y a los endemoniados, lunáticos y paralíticos; y él los sanó. Y lo seguía mucha gente de Galilea, de Decápolis, de Jerusalén, de Judea y del otro lado del Jordán. Mateo 4:23-25
«Si alguno viene a mí, y no renuncia a su padre y a su madre, ni a su mujer y sus hijos, ni a sus hermanos y hermanas, y ni siquiera a su propia vida, no puede ser mi discípulo. 27 Y el que no toma su cruz y me sigue, no puede ser mi discípulo. Lucas 14:26-27
Pórtense como hijos obedientes, y no sigan los dictados de sus anteriores malos deseos, de cuando vivían en la ignorancia. Al contrario, vivan una vida completamente santa, porque santo es aquel que los ha llamado. Escrito está: «Sean santos, porque yo soy santo.» 1 Pedro 1:14-16
Gracias Señor por todas la bondades que hemos recibido de tu mano, te pedimos Señor que nos ayudes a ser más radicales con nuestra vida, que ayudemos a otros a conocerte, que nos llenes de tu Espiritu Santo para saber cuando hablar y cuando callar, ayudanos a no ser piedra de tropiezo a los que aun no te conocen y a los que aun no han tomando su decisión de seguirte, que Tu Reino venga pronto a ellos, te lo pedimos en nombre de Jesucristo nuestro Señor, Amén.
Que tengan una linda semana y que Dios las bendiga grandemente.
Jackie C.