Estudio Miércoles 9 de Marzo del 2016

¡FELIZ CUMPLEAÑOS! mi querida Chely 🙂

Gracias Señor por otra excelente noche, gracias por Chely, por su vida y por su ejemplo y gracias a Dios por cada una de ustedes. Que linda noche y que buen estudio, gracias a todas por sus comentarios, por sus confesiones ¡WOW! eso hace que crezcamos mucho espíritualmente, su confesión no solo ayuda individualmente sino que también al grupo entero, una empieza y sigue la cadena, gracias por ser tan valientes y tan fieles con la confesión de nuestras faltas ¡Dios es bueno!

Hablando de fidelidad, el tema de hoy al igual que el del domingo fue: “El Dios que nos transforma” a veces vemos a Jesús como nuestros mayordomo, lo llamamos cuando lo necesitamos y punto por lo tanto nuestra entrega a él es nula o casi nula. La idea grande de hoy fue: “Jesús nos puede transformar completamente y exige una entrega total”. Dios nos puede transformar dramáticamente si se lo permitimos, como vimos hoy Satanás y los deseos de nuestra carne también puede trastornar la transformación que Dios esta haciendo en nosotros. Vimos el ejemplo de Pablo,después de perseguir a los seguidores de Jesús, él se entregó completamente a Jesús, él tomó su decisión por creer en Jesús, arrepentirse y bautizarse y en ese mismo momento se fue a predicar a los judios y luego a los gentiles, pero también vimos el ejemplo de Pedro que estando con Jesús y escuchando de Él su evangelio lo negó tres veces y para Pedro fue un poco díficil su entrega porque Satanás pidió sarandearlo y lo hizo y Pedro cayó pero se levantó y Dios lo utilizó grandemente

Hay momentos en nuestra vida que luchamos y permitimos de Dios nos transforme, hay otras ocaciones en las cuales ponemos nuestros deseos antes que los deseos de Dios y es allí cuando no dejamos que nos transforme y perdemos de vista el Reino de Dios y nos interesamos más en nuestro reino terrenal. Tenemos que luchar por estar enfocadas en el Reino de Dios como lo hicieron Pedro y Pablo, Pedro aunque un par de veces meciona la Biblia que perdió su enfoque, hasta Pablo lo tuvo que corregir él aceptaba lo corrección, se reenfocaba y seguía,  lo mismo podemos hacer nosotras.

«Padres y hermanos míos, escuchen ahora lo que tengo que decir en mi defensa.» Al oír que les hablaba en lengua aramea, todos guardaron silencio. Pablo siguió diciendo:  «Yo soy judío. Nací en Tarso de Cilicia, pero me criaron en esta ciudad, donde Gamaliel me instruyó con total apego a la ley de nuestros antepasados. El celo por Dios que ustedes sienten hoy, también lo sentí yo, pues perseguí a muerte a los de este Camino. Yo aprehendía y llevaba a las cárceles a hombres y mujeres; el sumo sacerdote y todos los ancianos me dieron cartas para apresar a los hermanos; ellos son testigos de que fui a Damasco para aprehender a los creyentes que estuvieran allí, y llevarlos a Jerusalén para castigarlos.

 »Pero sucedió que en el camino, ya cerca de Damasco y como a mediodía, de repente me rodeó una intensa luz del cielo, Caí al suelo, y entonces oí una voz que me decía: “Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?” Yo respondí: “¿Quién eres, Señor?” Y la voz me contestó: “Yo soy Jesús de Nazaret, a quien tú persigues.”  Los que me acompañaban vieron la luz, y se espantaron; pero no escucharon la voz del que me hablaba.  Entonces dije: “Señor, ¿qué debo hacer?” Y el Señor me dijo: “Levántate, y ve a Damasco; allí se te dirá todo lo que se ha determinado que hagas.”  Como yo no podía ver por causa de esa luz tan potente, los que me acompañaban me llevaron de la mano, y así llegué a Damasco.

 »Allí vivía Ananías, un hombre piadoso y apegado a la ley, de quien todos los judíos que allí vivían hablaban bien.  Ananías vino, se me acercó y me dijo: “Hermano Saulo, ¡recibe la vista!” Y en ese mismo instante recobré la vista y pude verlo.  Y él me dijo: “El Dios de nuestros padres te ha escogido para que conozcas su voluntad, y veas al Justo y escuches de sus propios labios su palabra,  pues tú serás su testigo ante todo el mundo de esto que has visto y oído.  ¿Qué esperas, entonces? ¡Levántate y bautízate, e invoca su nombre, para que quedes limpio de tus pecados!”

»Cuando volví a Jerusalén, mientras oraba yo en el templo, entré en éxtasis.  Vi entonces al Señor, y escuché que me decía: “Date prisa, y sal pronto de Jerusalén, porque no van a creer lo que les digas de mí.” Yo le respondí: “Señor, ellos saben que yo andaba por todas las sinagogas encarcelando y azotando a los que creían en ti.  Cuando corría la sangre de Esteban, tu testigo, yo estaba allí, aprobando su muerte con mi presencia y cuidando la ropa de quienes lo mataron.” Pero el Señor me dijo: “Anda, que voy a enviarte lejos, a los que no son judíos.”» Hechos 22:1-21

y que también nos ha librado del poder de la oscuridad y nos ha trasladado al reino de su amado Hijo,  en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de los pecados. Colosenses 1:13-14

Gracias de nuevo Padre por todo lo que recibimos de Tu mano, gracias por la unidad que nos has dado en este grupo, gracias por darnos la libertad de hablar abiertamente de nuestro pecado, ponemos nuestras vidas en tus manos, transformalas Padre como mejor te parezca, usanos grandemente en Tu Reino Señor, en nombre de Jesús te lo pedimos, amén.

Que sigan disfrutando su semana, las quiero mucho 🙂

Jackie C.

FOTOS

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *