Entonces Pedro empezó a hablar, y dijo: «En verdad comprendo ahora que Dios no hace acepción de personas, sino que a él le agrada todo aquel que le teme y hace justicia, sea de la nación que sea.
Ese mensaje dice que Dios ungió a Jesús de Nazaret con el Espíritu Santo y con poder, y que él anduvo haciendo el bien y sanando a todos los que estaban oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él.
Entonces Pedro dijo: «¿Hay algún impedimento para que no sean bautizadas en agua estas personas, que también han recibido el Espíritu Santo, como nosotros?» Y mandó bautizarlos en el nombre del Señor Jesús. Entonces le rogaron que se quedara con ellos algunos días más. (Hechos 10:34-35, 38, 47-48 RVC)
Entonces me acordé de las palabras del Señor, cuando dijo: “Ciertamente, Juan bautizó con agua; pero ustedes serán bautizados con el Espíritu Santo.” Pues si Dios les concedió a ellos el mismo don que a nosotros, que hemos creído en el Señor Jesucristo, ¿quién soy yo para oponerme a Dios?»
Y con la ayuda del Señor un gran número de personas creyó y se convirtió al Señor.
Y cuando él llegó y constató la bondad de Dios, se alegró mucho y exhortó a todos a permanecer fieles al Señor, con todo el fervor de su corazón.
Durante todo un año se congregaron con la iglesia y enseñaron a mucha gente. Y fue allí en Antioquía en donde a los discípulos de Jesús se les llamó cristianos por primera vez. (Hechos 11:16-17, 21, 23, 26 RVC)
Que buen libro estan estudiando chicas, las quiero muchooooo Kai