Regocíjense en el Señor siempre. Y otra vez les digo, ¡regocíjense! (Filipenses 4:4 RVC)
Estén siempre gozosos. (1 Tesalonicenses 5:16 RVC)
Gracias a Dios por todas ustedes, ¡¡¡las amo!!!
Gracias Señor por tan linda noche, gracias por derramar tu Santo Espíritu en éste lugar. Gracias a todas por el gran trabajo que hicieron para invitar, gracias por el enfoque que tienen para trabajar en ésta obra, sigamos así, honremos al Señor nuestro Dios con nuestro trabajo, a Él sea la gloria y honra.
Entremos por sus puertas y por sus atrios con alabanzas y con acción de gracias; ¡alabémosle, bendigamos su nombre! ¡El Señor es bueno! ¡Su misericordia es eterna! ¡Su verdad permanece para siempre! (Salmos 100:4-5 RVC)
Tengan en cuenta que la paciencia de nuestro Señor es para salvación, tal y como nuestro amado hermano Pablo, según la sabiduría que le ha sido dada, les ha escrito en casi todas sus cartas, donde habla de estas cosas, aun cuando entre ellas hay algunas que son difíciles de entender y que los ignorantes e inconstantes tuercen, como hacen también con las otras Escrituras, para su propia perdición. Pero ustedes, amados hermanos, que ya saben todo esto, cuídense de no ser arrastrados por el error de esos malvados, para que no caigan de su firme postura. Más bien, crezcan en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo, a quien sea dada la gloria ahora y hasta el día de la eternidad. Amén. (2 Pedro 3:15-18 RVC)